Liney Fuentes Cabrera, madre del niño de dos años asesinado por su expareja, Fabián Quintero Ramírez, denunció públicamente la inacción de las autoridades ante las constantes amenazas que había recibido. En una entrevista exclusiva, Fuentes relató cómo a pesar de haber interpuesto una denuncia formal días antes del crimen, la Policía no le brindó la protección necesaria.

Quintero, quien se desempeñaba como pastor evangélico, había amenazado de muerte tanto a Fuentes como a su madre. A pesar de las advertencias, las autoridades no tomaron las medidas correspondientes, lo que permitió que el trágico suceso ocurriera. La madre del menor aseguró que había acudido a la Fiscalía y a la Policía en busca de ayuda, pero sus solicitudes fueron ignoradas.

«La Policía nunca me respondió y nunca vino a darme vueltas cuando yo ya llamaba», afirmó Fuentes, quien expresó su profundo dolor y rabia por la falta de respuesta de las autoridades.

El crimen ha conmocionado a la comunidad de Malambo y ha generado un llamado a las autoridades para que investiguen a fondo el caso y tomen medidas para evitar que hechos similares se repitan. Fuentes exige justicia por la muerte de su hijo y responsabiliza a la Policía por no haber actuado ante sus denuncias.

[Escuche]

Reacciones y consecuencias:

La comunidad de Malambo ha convocado a un plantón para exigir justicia y mayor seguridad. Además, se espera que este caso genere un debate sobre la efectividad de los protocolos de protección para las víctimas de violencia intrafamiliar y la necesidad de fortalecer la respuesta de las autoridades ante este tipo de denuncias.