Los afiliados a la Unidad de Salud de la Universidad del Atlántico denuncian una grave crisis en la prestación de servicios, caracterizada por la falta de medicamentos, demoras en las citas médicas y una atención deficiente en las clínicas contratadas.
Javier Fernández Palis, presidente del sindicato de la Universidad del Atlántico y vicepresidente de la junta directiva de la Unidad de Salud, alertó sobre un déficit de 25 mil millones de pesos en la entidad, lo cual ha generado una cadena de incumplimientos en el pago a proveedores y clínicas.
Entre las principales denuncias se encuentran:
- Falta de medicamentos: La escasez de medicamentos es constante, poniendo en riesgo la salud de los afiliados, especialmente de aquellos con enfermedades crónicas.
- Demoras en las citas médicas: Los afiliados enfrentan largas esperas para acceder a especialistas, lo que retrasa los diagnósticos y tratamientos.
- Atención deficiente en las clínicas: Algunas clínicas contratadas por la Unidad de Salud estarían brindando una atención de baja calidad, negando incluso la hospitalización a pacientes con enfermedades graves.
- Mal manejo administrativo: La falta de control en la gestión financiera y administrativa de la Unidad de Salud ha generado un caos en la institución, con facturas sin pagar y documentación en condiciones precarias.
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Fernández Palis señaló que la Universidad del Atlántico ha destinado 17.200 millones de pesos para salvar a la Unidad de Salud, pero que los recursos no están siendo utilizados de manera eficiente. Además, denunció que se han identificado sobrecostos en algunos pagos a proveedores y clínicas.
Ante esta situación, los afiliados exigen una solución inmediata a la crisis, que garantice una atención de calidad y oportuna. Asimismo, solicitan una investigación exhaustiva sobre el manejo de los recursos de la Unidad de Salud.
